No todos saben que las cortinas pueden ser un factor de ahorro energético importante. Recientes innovaciones tecnológicas nos dan acceso a cortinas fabricadas con materiales como fibra de vidrio y PVC que permiten regular la temperatura de los inmuebles a niveles muy eficientes. Algunos de los nuevos tejidos proporcionan una protección térmica eficaz al mismo tiempo que dejan pasar la luz natural para una iluminación adecuada de los espacios, aspecto muy importante a tener en cuenta especialmente a la hora de proyectar los ambientes de trabajo.

Las cortinas, en general, contribuyen al ahorro energético por varios motivos, uno de ellos es su flexibilidad: ya que pueden abrirse y cerrarse a distintos niveles de apertura, ofreciendo una protección regulable contra el calor durante el verano, especialmente en las superficies expuestas hacia el sur. Eligiendo los materiales indicados y utilizándolos de manera consciente, una buena cortina puede contribuir con un uso máslimitado de los acondicionadores, los cuales se sabe consumen mucha energía durante los períodos más calurosos.

Asimismo, durante el invierno, una cortina con características de aislamiento térmico permite mantener la temperatura constante dentro de los ambientes y reducir el uso de los sistemas de calefacción que, entre otras cosas, resecan el aire dentro de los espacios. Utilizando cortinas para ahorro energético, no solo las facturas de los servicios serán contenidas, sino que también se podrá ahorrar en el mantenimiento de los sistemas de acondicionamiento y calefacción, los cuales al ser utilizados con más moderación requerirán de menos intervenciones.

Por lo tanto, a la hora de plantearte un ahorro energético en casa u oficina, piensa que las cortinas constituyen una inversión inteligente para ahorrar dinero y energía mientras gozamos de un ambiente confortable durante todas las estaciones del año. ¡Consúltanos!